LAS PYMES EN EL MODELO DE PRODUCCIÓN ITALIANO

Entendiendo que las MIPYMES son empresas que se caracterizan por la cantidad mínima de empleados y en sus bajos recursos económicos; es apenas entendible la necesidad de crear modelos de producción específicos y eficientes para este tipo de empresas, de lo contrario, su productividad difícilmente podría alcanzar los mercados internacionales.

Fue esta premisa la que llevó a que en Italia se gestará un modelo exitoso de integración o asociatividad, que responde de manera directa a un diseño de productividad territorial.

Bajo el concepto de Distritos industriales, todas las empresas de un sector se unen para trabajar en un mismo proceso productivo, logrando así hacer frente a las economías de escalas de las grandes empresas.

Es decir, que pequeñas y medianas empresas de un sector económico y geográfico específico se unen para trabajar mancomunadamente en el desarrollo y crecimiento de un sector o producto, de tal manera que la comercialización del producto final significa ganancias y beneficios para todas las empresas del distrito industrial.

Ejemplo de estos distritos tenemos los motores eléctricos de Vicenza, los cueros curtidos de Arzignano, la producción de automóviles deportivos como Lamborghini o Maserati En la ciudad de Módena, o los Ferrari en Maranello. En Carpi producen los tejidos de punto. En Bolonia, el complejo de embasado y empaquetado, entre otros muchos.

Estas integraciones promueven además, la creación de nuevas empresas que suplan las necesidades del mercado, es decir, que cuando el distrito considera la necesidad de desarrollar una nueva MIPYME que aumente la cantidad de producción, las mismas empresas buscan entre ellas a sus mejores empleados para que sean ellos quienes las creen y dirijan, y de esta manera asegurar la calidad de sus productos y la continuidad eficiente de cadena de abastecimiento.

Y algo igualmente interesante, es la fortaleza y posicionamiento que esto fomenta a una región en su totalidad. Al lograrse las ventas de un producto, se genera un beneficio global tanto en riquezas como en reconocimiento. El caso tal vez más relevante es el del gran conglomerado lácteo Parmalat, el cual deriva su nombre de la región donde proviene “Parma”. Gracias a su proceso de asociatividad, esta región es hoy reconocida a nivel mundial como gran productora de leche y derivados.

En Colombia tenemos casos de menor envergadura, pero de gran importancia como los bocadillos veleños de la ciudad de Vélez, o más al sur, el de los sombreros suazeños del municipio de Suaza, Huila.

Pero, estos ejemplos colombianos difícilmente logran éxitos de carácter internacional, debido a que la asociatividad es mínima, es decir, tanto la política comercial de nuestro país y las mismas MIPYMES se han limitado al desarrollo de Clústeres que simplemente se dedican a crear una cadena de abastecimiento, y no han logrado una cultura real de integración en la que se comparta: tercerización de procesos industriales, manejo integral de precios al público, inversión unísona en vías, medios de comunicación, publicidad, investigación, desarrollo en conjunto de nuevos productos, creación de empresas lideradas por sus propios empleados, etc.

Es decir, que mientras en Italia una empresa le presta dinero a su mejor empleado para que cree su propia empresa, en aras que este sea su proveedor, en Colombia se “amarra” a este mismo empleado para que no salga de su control y se convierta tal vez en su competencia.

Si Colombia lograra este gran alcance de integración, se podría dar solución a grandes problemas económicos que aún persisten, y que nos obligan a seguir siendo la economía subdesarrollada de hace 4 siglos, tales como:

·         Desempleo

·         Economía informal (Vendedores ambulantes)

·         Aumento de las tasas de ocupación (Diferente a tasas de desempleo)

·         Piratería y contrabando

·         Injusta repartición de las riquezas

·         Ayudas estatales mal direccionadas

·         Mala imagen a nivel internacional

·         Evasión de impuestos

·         Pérdida de la identidad de país.

El llamado es a aprender de los demás países y reconocer como sus desarrollos pueden ayudarnos a nosotros a generar el tan anhelado bienestar económico de nuestros pueblos.

FUENTE

Las PyMES en Italia: ¿Por qué estudiar un modelo exitoso? Roberto Bloch y Nahuel Oddone [En línea]. Revista OIDLES - Vol 1, Nº 2, diciembre 2007 [Citado el 28/12/2010]. Disponible en http://www.eumed.net/rev/oidles/02/Oddone.htm#4.